El sector asegurador desarrolla nuevas oportunidades

El sector asegurador se ha caracterizado por ser una de las industrias más tradicionales y estables, pero en los últimos años se ha enfrascado en un profundo proceso de transformación digital que ha revolucionado los canales de distribución y las relaciones entre los clientes y las entidades aseguradoras. Desde el punto de vista operativo, estos cambios están generando un nuevo abanico de oportunidades de negocio que no solo permiten reducir costes e incrementar la productividad sino también optimizar los productos, mejorar la lealtad del cliente y, por supuesto, aprovechar nuevos nichos comerciales con una mayor responsabilidad social corporativa.

Alianzas estratégicas dentro y fuera del sector asegurador

Los seguros embebidos no son un producto nuevo, pero siguen ganando terreno a medida que los límites entre las diferentes industrias se difuminan. Estos productos no se venden al cliente de manera individual, sino que se proporcionan como una característica integrada en el producto o servicio que adquiere. Tesla, por ejemplo, está empezando a incorporar los seguros a su catálogo.

El seguro embebido es útil porque resuelve un problema básico en la distribución de seguros: la separación entre la compra del producto o servicio y la posterior adquisición de la póliza que lo cubre. Por consiguiente, este tipo de productos es beneficioso para todos: fabricantes, consumidores y aseguradoras.

De hecho, el 70 % de los asegurados se muestran abiertos a contratar seguros a una entidad de otro sector y el 66 % opinan que las aseguradoras deberían ayudarles a satisfacer diferentes necesidades, según reveló una encuesta de Accenture. Por consiguiente, las alianzas entre empresas de dentro y fuera del sector asegurador son una excelente oportunidad para ofrecer una propuesta de valor más completa a los consumidores y para captar nuevos clientes.

Para aprovechar esta oportunidad, las empresas de seguros en España no solo deben establecer alianzas estratégicas con actores de diferentes industrias, sino también escuchar atentamente a los clientes para diseñar productos y servicios innovadores que satisfagan sus necesidades, proporcionándoles de la manera más ágil y flexible posible.

Seguros sostenibles y accesibles para todos

El diseño de productos con impacto ESG sigue siendo un reto para el sector asegurador, pero también es una enorme oportunidad. De hecho, la mayoría de las entidades aseguradoras están comprometidas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible que forman parte de la agenda 2030, por lo que ya están trabajando para encontrar nuevas fórmulas que fomenten el cuidado del medio ambiente y la inclusión social.

El uso de avances tecnológicos como el Big Data, el IoT y la Inteligencia Artificial en el proceso de tarificación permitiría ofrecer pólizas más personalizadas y “escalables”, sobre todo a los clientes más vulnerables, los autónomos y las microempresas. Además de los microseguros, una fórmula que se está extendiendo por Latinoamérica e India, las pólizas bajo demanda representan otra oportunidad interesante.

El hecho de que los clientes pueden activar y desactivar su seguro, pagando únicamente cuando surge la necesidad real de protección, lo convierten en una opción más económica y flexible en comparación con las pólizas tradicionales y al mismo tiempo se adapta mejor al nuevo modelo de economía colaborativa y sostenible.

Las entidades aseguradoras también pueden desempeñar un papel importante en el cambio climático, no solo a través de sus coberturas contra las catástrofes climáticas, sino mediante inversiones en proyectos de la economía verde. Los fondos de pensiones y las empresas de seguros en España un patrimonio de más de 427 mil millones de euros, lo cual significa que tienen la oportunidad de encauzar esos recursos hacia inversiones sostenibles, rentables y con un impacto social beneficioso.

Open Insurance para crear nuevos productos y modelos comerciales

En un mundo donde los datos cobran cada vez más relevancia, el modelo Open Insurance parece destinado a imponerse en el sector asegurador. El Open Banking, por ejemplo, ha tenido un impacto transformador ya que en la actualidad el 7 % de los ingresos bancarios totales en Europa están asociados con la banca abierta, según Accenture. El Open Insurance se refiere al acceso y compartición de datos relacionados con el seguro, tanto personales como impersonales, entre entidades aseguradoras y terceros, normalmente a través de APIs.

Una encuesta de Accenture ha revelado que el 73 % de los asegurados estaría dispuesto a compartir datos para mejorar la variedad y calidad de los productos que le ofrece su aseguradora. Por tanto, el intercambio de datos, siempre conforme a las normas de competencia y las leyes de protección de datos, podría permitir que el sector asegurador cree modelos comerciales innovadores y productos altamente personalizados que cubran las necesidades de sus clientes y les faciliten la vida.

Los seguros abiertos también permitirían reducir los costes, agilizar las operaciones, en especial la contratación de pólizas, y reducir los errores humanos. Para aprovechar esa oportunidad, las entidades aseguradoras necesitan crear espacios para conectarse a los ecosistemas de terceros y permitir que estos se conecten a los suyos, así como empezar a plantear casos de uso innovadores en el marco que ofrecen los sandboxes. Esa combinación de tecnología, innovación y responsabilidad corporativa sentará las bases de los seguros del futuro.