El puntaje crediticio es un indicador del riesgo asegurado, pero el puntaje crediticio alternativo permite realizar una evaluación de riesgos más precisa.
El puntaje crediticio como indicador para ajustar las primas al riesgo asegurado
La manera en que una persona administra sus finanzas es un indicador relevante para las compañías de seguros ya que los estudios de actuarios han encontrado un vínculo con las reclamaciones. Por esa razón, el puntaje crediticio puede usarse como un indicador más para identificar a los asegurados que representan un riesgo mayor, de manera que las aseguradoras puedan ajustar sus primas al riesgo asegurado.
¿Qué es el puntaje crediticio?
El puntaje crediticio o score crediticio es una calificación basada en el historial de pago de los usuarios que revela la probabilidad de repagar un préstamo y estima la puntualidad en los pagos. Es un indicador que suelen usar las entidades bancarias antes de conceder un préstamo ya que refleja el riesgo de impago que pueden representar determinados clientes.
Para calcular el puntaje crediticio se tienen en cuenta diferentes factores, desde el número de pagos realizados puntualmente hasta la capacidad de endeudamiento, los tipos de préstamos solicitados, el monto total de las deudas, el tiempo medio por el que se mantienen las líneas de crédito o los préstamos, así como la capacidad de pago tras saldar los gastos fijos.
Cada sistema de score crediticio pondera de manera diferente las variables para obtener su propia calificación, de manera que en el sector asegurador también existe una clasificación numérica conocida como “puntuación de seguro”.
La puntuación de seguro se utiliza para determinar la probabilidad de que los clientes presenten reclamaciones. Proporciona una idea de la magnitud del riesgo asegurado y ayuda a las aseguradoras a calcular las primas. Este indicador también refleja la probabilidad de que los clientes dejen de pagar la póliza o la cancelen. Como regla general, cuanto mayor sea el puntaje, menor es el riesgo previsto.
Pros y contras del puntaje crediticio en el sector asegurador
Hace algunas décadas, las aseguradoras estadounidenses comenzaron a utilizar el puntaje crediticio como un indicador de riesgo en las nuevas contrataciones o renovaciones de los seguros de coche. Dichas puntuaciones se utilizaban en los procesos de suscripción para tomar decisiones sobre las primas, en aras de ajustarlas al nivel real de riesgo asegurado.
Un estudio de la Universidad de Texas les da la razón. Tras analizar más de 175 00 pólizas de coches, llegó a la conclusión de que “cuanto más bajo es el puntaje crediticio de un asegurado, mayor es la probabilidad de que use el seguro de coche y mayor es la pérdida que debe esperar la aseguradora”.
En general, los conductores con peores puntuaciones de seguro tienen el doble de probabilidades de presentar una reclamación, respecto a aquellos con mejores puntajes.
Por supuesto, el sistema de puntaje crediticio no es perfecto ni infalible. A veces puede ser limitado, como en el caso de los asegurados jóvenes que aún no cuentan con un historial crediticio sólido, pero pueden tener buena capacidad de pago y administrar adecuadamente sus finanzas. Este sistema también puede ser injusto para las personas de bajos ingresos y/o aquellas sub-bancarizadas ya que reduce sus posibilidades de acceder a un seguro o aumenta de manera desproporcionada las primas.
Por esa razón, el sector asegurador está yendo un paso más allá de los parámetros convencionales. Al incluir más datos y no limitarse únicamente al puntaje crediticio, es posible realizar una evaluación más precisa del riesgo asegurado, personalizar las primas y dar un trato más justo a los clientes sin que ello comprometa la estabilidad financiera del negocio.
El puntaje crediticio alternativo, una medida más amplia y fiable
Con el auge de los datos y la expansión de la inteligencia artificial, el aprendizaje automático y el análisis predictivo, las aseguradoras pueden utilizar información alternativa para ofrecer pólizas más personalizadas y asegurar el riesgo correctamente sin exponerse a riesgos innecesarios.
Ya se están desarrollando diferentes metodologías para evaluar el riesgo, algunas incluyen datos alternativos ya que son una fuente de información con un gran poder predictivo sobre el comportamiento de los clientes. Con más datos provenientes de diversas fuentes, además del comportamiento crediticio, las personas pueden generar un historial más completo y fidedigno que permita generar una calificación justa.
¿Pueden las compañías calcularlo?
Las compañías de seguros pueden calcular un score crediticio alternativo basándose en metadatos de teléfonos móviles y web para evaluar de manera precisa y anónima la solvencia de los usuarios. Esa información les permitirá formar una imagen más completa de sus clientes, tomar mejores decisiones sobre los precios, coberturas y condiciones, así como estimar el riesgo asegurado con mayor exactitud.
Las aseguradoras incluso pueden calcular puntajes crediticios prácticamente en tiempo real en función de los datos de comportamiento de los consumidores. Lo cual significa que pueden tomar decisiones rápidas basadas en la naturaleza del riesgo en la vida práctica, no solo el que se refleja sobre el papel. Esas nuevas metodologías para asegurar el riesgo permiten desarrollar un modelo más transparente entre el cliente y las aseguradoras, trabajar de manera más eficiente y mejorar las cifras de negocio gracias a una evaluación de riesgos más exacta y fiable.